Todo depende de nosotros, y ésta es la maravilla de este trabajo. Eres la única persona responsable del éxito pero también del fracaso. Y tanto una cosa como otra dependerán de decisiones que tendrás que ir tomando por el camino. ¿Cuándo cierro una posición ganadora? ¿Hasta dónde estoy dispuesto a aguantar una posición perdedora? ¿Cuánto dinero invierto en una operación? ¿Cuánto dinero espero obtener de cada inversión?
Créeme, la mayoría de gente que empieza no se plantea en serio estas cuestiones básicas. Pero, al final, todo se resume en tener muy claros estos puntos:
✅ Conocer el activo que estoy operando y el mercado donde cotiza (si no, es como si fueras a una tienda y comprases algo que no sabes lo que es).
✅ Operar sólo cuando haya una ventaja estadística a mi favor (tenemos que poner la teoría de los grandes números a nuestro servicio).
✅ Saber qué parte de mi dinero debo invertir en un activo concreto (de esta forma estarás limitando el riesgo que asumes).
✅ Prever en qué momento exacto cerraré la posición (tanto si gana como si pierde).
✅ No realizar excepciones con ninguno de los puntos anteriores.
Te lo creas o no, el más difícil de llevar a cabo es el último.
Seguramente es una pregunta que nos llevará toda la vida a saber responder... pero, si la limitamos a las inversiones, cuanto más tarde encuentres la respuesta, más posibilidades tendrás de perder hasta la camisa.
¿Quiero realizar operaciones de larga duración? ¿Quiero abrirlas y cerrarlas en la misma sesión y dormir tranquilo sin nada abierto? ¿Cómo voy a reaccionar cuando vea que pierdo el 30% de la inversión? ¿Sabré cumplir las normas que yo mismo me he impuesto? ¿Seré capaz de asumir una pérdida o esperaré un poco más deseando que se dé la vuelta y recuperar el dinero?